Las rayas son el estampado que
nunca falta, que nunca cansa, que nunca aburre y nunca falla, el estampado que
toda mujer e incluso hombres tienen en su armario a día de hoy.
Pero
para hablar de rayas nos tenemos que remontar a la baja Edad Media, donde estas
eran usadas como un símbolo de desprestigio, incluso, para los religiosos del
siglo XIII era un símbolo del diablo, prostitutas, adulteras, traidores,
verdugos y de los marginados por enfermedades, para alertar a la población y
que así nadie se acercara a ellos.
Sin
embargo, una vez terminado el periodo gótico, entrando en el Renacimiento, las
rayas volvieron a conseguir su jerarquía incluyéndolas como elemento de diseño,
un ejemplo de ello son las vestimentas de los monarcas franceses, como
Francisco I que fue retratado por Clouet con vestiduras a rayas. A su vez, las
rayas consiguieron cruzar el charco e instaurarse en América como símbolo de
libertad y eso ayudo a que entraran de nuevo en Europa de manera triunfal.
Pero no fue hasta el siglo XX, donde comenzaron a tener nuevos significados y a introducirse en la ropa de uso diario, intima, infantil y náutica. Algunos modistos las incluyeron en la ropa masculina, sobre todo en jersey, debido a la influencia de los marineros franceses, hasta que Coco Chanel, usando su camiseta de rayas, la integro por primera vez en la moda femenina, haciendo de esta un ‘must have’ en el armario de la mujer.
¿Y
después de saber su historia… seguirás usando rayas?
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