El zapato con tacón de cuña se ha impuesto desde hace unos años
como un imprescindible entre el calzado femenino. Los hay para todos los
gustos, de todos los colores y de diversos materiales. Además existen modelos
más informales y otros ideales para ocasiones señaladas. Pero lo más importante es que no suponen una tortura para
nuestros pies y consiguen estilizar nuestras piernas de la misma manera.
Estos beneficios parece ser que ya los conocían las mujeres
de los años 30, época en la cual se lanzaron al mercado. El diseñador que las
ideó fue el italiano Salvatore Ferragamo. Concretamente creó la cuña ortopédica
en 1935, y no fue hasta 1936 cuando diseño la de tacón. Su creación más
conocida fue la cuña de corcho, ya que en aquella época había escasez del cuero
y hule y el corcho era una material más ligero que la madera.
Las modelos de Ferragamo, durante los años cuarenta y cincuenta, llenaron las páginas de las revistas de
moda más importantes del mundo exhibiendo
calzado con tacón de latón en forma de jaula o las babuchas de gamuza en forma
de cuña. Pero la actriz que marcó un antes y un después en la historia de las
cuñas fue Marilyn Monroe, actriz fetiche de Ferragamo junto con Audrey Hepburn,
Judy Garlan o Ava Garner.
Audrey Hepburn con Salvatore Ferragamo |
Katherine Hepbrun en 1940 |
Salvatore Ferragamo fue considerado
un visionario y sus diseños servían de inspiración a otros zapateros de la
época. Falleció en 1960 a los 62 años de edad, pero su nombre continúa como una
compañía internacional, cuya gama de productos abarca zapatos de lujo, bolsos,
gafas, accesorios de seda, relojes, perfumes y una línea de ropa prêt-à-porter.
Sonia García
No hay comentarios:
Publicar un comentario